En el año 2017, pudimos presenciar el debut del avión Stratolaunch, apodado como Roc (nombre que viene dado por el ave de la mitología persa). Un año después, se llevaron a cabo diversas pruebas en tierra con este avión, y hoy, en 2021, el equipo técnico ha reiniciado las operaciones de prueba para garantizar que este descomunal avión esté listo para operar en el futuro más próximo.
El avión Stratolaunch, cuenta con una envergadura de 117 metros de punta a punta, siendo a día de hoy el modelo de avión de mayores dimensiones de todo mundo. El artífice de este ambicioso proyecto fue Paul Allen, cofundador de Microsoft, quien comenzó a desarrollar el Stratolaunch con el objetivo de viajar al espacio.
La nueva prueba de vuelo de Roc ha tenido lugar Estados Unidos, concretamente en el desierto de Mojave, ubicado en el estado de California. En dicho lugar, existe un aeropuerto espacial que permite llevar a cabo pruebas con aviones tan grandes como este, y la duración de dicha prueba de vuelo ha sido de tres horas y diez minutos aproximadamente.
Una pregunta que se hacen muchas personas es, ¿Cuál es el objetivo de crear un avión de tales dimensiones? Pues bien, la idea originaria era la de crear un avión con la envergadura y potencia suficientes como para levantar otros aviones y naves, con el objetivo de colocarlos en órbita sin la necesidad de utilizar cohetes.
Sin embargo, en el año 2019, la compañía Capital Management adquirió Stratolaunch, y a partir de este momento el enfoque de esta cambió. En lugar de que la empresa se dedicase únicamente a crear aviones gigantes con el objetivo de utilizarlos como vehículo de lanzamiento, esta también empezó a crear aviones hipersónicos (es decir, aquellos que superan en más de un 500% la velocidad del sonido).
De esta manera, el papel del nuevo Roc sería servir de portaaviones para la elevación de aviones hipersónicos. La empresa ya está preparando flotas enteras compuestas por aviones de este tipo, y gracias al avión Stratolaunch, el ahorro en combustible en estas operaciones interespaciales será más que notable.
Sin embargo, el hecho de que Roc esté diseñado para esta labor, no implica que no pueda ser utilizado para transportar y levantar otro tipo de cargas. Por ejemplo, este puede resultar de gran utilidad a la hora de colocar naves en el aire, o satélites a bordo de pequeños cohetes que luego lleguen a la órbita terrestre.
Por el momento, desconocemos cuáles son los planes de futuro a largo plazo de la compañía Stratolaunch, pero sí sabemos que esta corporación dará mucho que hablar en el ámbito de la navegación espacial durante los próximos años. Paulatinamente, la innovación de empresas como esta permite convertir algo que hace años parecía algo impensable, en una realidad tangible.