A finales de octubre de 2019, se hacía pública la intención del Instituto Nacional de Estadística de llevar a cabo un estudio basado en rastrear nuestros dispositivos móviles durante 8 días, con el fin de analizar los desplazamientos de millones de usuarios, y así saber cuánta gente habita cada rincón del país (además de conocer algunos de los patrones de comportamiento de la población en días laborables y festivos). De este modo, se pudo analizar el tráfico de personas en las áreas más concurridas, información que en un futuro puede ayudar a hacer las ciudades más eficientes.
A raíz de la expansión del COVID-19 y, siguiendo los pasos de países como Israel, China o Corea del Sur, el Ministerio de Sanidad ha encargado el desarrollo de una aplicación digital sobre el Coronavirus, que permitirá saber dónde están los móviles de los usuarios durante el estado de alarma. Quien se descargue la aplicación podrá hacer una autoevaluación de los síntomas de la enfermedad, y en paralelo, el sistema automáticamente verificará si el usuario está en la comunidad autónoma en la que indica estar.
El objetivo de la aplicación se basa en conocer la ubicación de los usuarios durante el estado de alarma, y saber dónde se concentran las posibles aglomeraciones de gente con el fin de evitar la expansión del virus.
Este proyecto de momento ha sido puesto en marcha en la Comunidad Valenciana, donde ya lleva días funcionado con la colaboración de la Generalitat Valenciana y las operadoras de telefonía móvil. De momento, esta App está resultando muy útil para averiguar las zonas y barrios donde más gente sale a la calle, dónde se concentra más gente a la misma hora, quien está incumpliendo el confinamiento, o en que zonas se propaga con mayor intensidad el brote. Todos estos datos servirán para facilitar el trabajo de los epidemiólogos, que podrán hacer estimaciones del número de infectados, hospitalizados, ucis que se necesitan, y se coordinarán con todos los departamentos de salud de la Comunidad Valenciana, siendo la primera vez que se usará la inteligencia artificial para controlar los movimientos de población y tratar de controlar la epidemia.
Pero, ¿Es legal que se utilicen nuestros datos?
La respuesta es sí y, según los expertos, la nueva medida aprobada por el gobierno si mantiene un adecuado equilibrio entre la libertad y la seguridad. Desde el gobierno, se ha aclarado que los datos son totalmente anónimos y que no se podrán utilizar para espiar a las personas, ya que serán borrados una vez que pase la emergencia sanitaria, de manera que la privacidad de los ciudadanos no se vea comprometida.