El impacto de las nuevas tecnologías y su incorporación en todos los ámbitos de la industria y de nuestra vida cotidiana, han implicado también nuevos hábitos de consumo. En la última década, se ha registrado un notable cambio en las costumbres de los compradores, y es que la compra online se está convirtiendo en la forma preferida entre los jóvenes y no tan jóvenes para adquirir productos y servicios de todo tipo.
Es una realidad que el comprador actual no quiere perder demasiado tiempo de espera la tienda física, y detesta las colas. Es por eso que algunas grandes empresas como Inditex, Nike o el gigante del comercio electrónico Amazon, están apostando por nuevos modelos de tienda tipo autoservicio, los cuales suponen una forma más rápida y cómoda de comprar.
En el caso de Amazon, en diciembre de 2016, la compañía ya inauguró en Seattle su primera tienda sin cajeros con el lema “Simplemente salir”. Esta tienda en principio solo estaba abierta para sus empleados, pero posteriormente se dio acceso a todo el público, y la aceptación fue increíble.
La tienda en cuestión es un supermercado donde tan solo necesitas descargar su aplicación (y una vez ahí solicitar un código QR) para tener acceso. Una vez dentro, tan solo tienes que coger el producto que deseas y marcharte, ya que al salir de la tienda, los productos que has cogido se han cargado a tu cuenta de Amazon y en unos 10 minutos recibirás un mensaje con tu ticket de compra.
Otra marca que se ha lanzado a este tipo de concepto de compra rápida y sin pasar por una caja tradicional es Nike, que ya lleva desde 2018 con su tienda `”House of innovation 000” en la Quinta Avenida de Nueva York. Esta tienda está dedicada a la experiencia de compra y satisfacción del cliente, y cuenta con casilleros digitales, colecciones exclusivas, y el llamado Nike Instantcheckout, para poder a través de la aplicación de Nike escanear y pagar los artículos que se cargan directamente en tu tarjeta de crédito.
Inditex ya está apostando por ofrecer otra forma de comprar en sus tiendas usando tecnología de autoservicio RFID , lo que le permite acelerar el proceso de pago en las tiendas. Los clientes pueden escanear los artículos que van a adquirir y una vez completado el pago, las alarmas se eliminan de la ropa y los propios clientes eliminan las etiquetas de seguridad de las prendas.
Otra novedad son los espejos inteligentes, que permiten al cliente ver cómo le quedaría una prenda sin ni si quiera probársela. En muchas ocasiones se ha hablado de que este mismo sistema se implementará en páginas web y se empleará cuando un usuario desee comprar ropa en cualquier tienda online (en este caso no sería un espejo, sino un software instalado en el ordenador).
Con el tiempo empezaremos a ver todo este tipo de incorporaciones tecnológicas cada vez en más tiendas, y se implantarán nuevos procesos de compra más eficientes. Al fin y al cabo, vivimos en una sociedad donde la inmediatez y la comodidad están a la orden del día, y valoramos mucho estos aspectos en nuestra experiencia de compra.