A raíz del proceso de digitalización que hemos vivido durante los últimos años, cada vez son más las necesidades que tienen las empresas de proteger sus sistemas y equipos ante posibles ataques informáticos. Esto se debe a que todas ellas son hasta cierto punto vulnerables a estos ataques, por lo que encontrar profesionales con amplios conocimientos en este campo se ha convertido en una prioridad en muchos casos.
Ahora bien, aunque cada vez más universidades y centros de estudios están incorporando formación en ciberseguridad (ya han aparecido incluso los primeros grados universitarios), sigue existiendo una brecha notable en lo referente a este campo. Concretamente, algunos profesionales de este ámbito consideran que el problema no es la falta de talento, sino la escasa remuneración que ofrecen las empresas a estos perfiles a pesar de su importancia en el panorama empresarial actual.
Sin embargo, el problema de la formación va mucho más allá. Es muy importante que los centros universitarios incorporen formación en ciberseguridad, pero esta sigue siendo limitada dado que se queda en el plano teórico, y es necesario que estos profesionales tengan una especie de “campo de entrenamiento” para poder afrontar situaciones similares a las que tendrán que afrontar en un futuro.
Desgraciadamente, la realidad es que a día de hoy muchos jóvenes hackers dan sus primeros pasos en este mundo a base de piratear sistemas ajenos y delinquir. Por ejemplo, hace algunos meses se detuvo a un madrileño de 16 años que hackeó una consultora española a través de un poste de autoventa en un restaurante.
Obviamente, esto plantea un grave problema, dado que la delincuencia no puede ser en ningún caso una vía de formación para el talento joven. A raíz de esta situación, están emergiendo startups con plataformas de formación que no se limitan a impartir la teoría, sino que también plantean desafíos reales a sus alumnos para que estos puedan ver sus capacidades en un escenario que perfectamente podría ser real.
Este es el caso de la empresa Hackrocks, que aunque sólo tiene unos pocos meses, ya se ha posicionado como una de las plataformas de formación en ciberseguridad más innovadoras del momento. Esta plataforma funciona a través de pago por suscripción, de manera que cualquier persona con ciertas nociones de ciberseguridad que quiera aprender técnicas de hacking, únicamente tenga que pagar una cuota de 9,99 euros mensuales, y esto le da acceso a todo el contenido que ofrece la plataforma.
Además, la compañía también ofrece soluciones en el ámbito B2B. Por ejemplo, si una entidad bancaria contrata sus servicios, Hackrocks pondrá a disposición de sus equipos una especie de simulación de sistema informático similar al del banco, de manera que los empleados puedan formarse en un entorno lo más real y práctico posible.
Resulta curioso ver cómo las empresas se están adaptando a esta nueva realidad. Actualmente, la mayoría de ellas ya conoce la importancia de la ciberseguridad, y de tener un sistema sólido y sin fisuras que evite poner en compromiso la información y los datos que gestiona la organización.