Micropchips, ¿El futuro?
En los últimos años, la implantación de microchips en personas ha empezado utilizarse en algunas empresas, principalmente de países como Suecia, Estados Unidos, Alemania o Nueva Zelanda. Sin embargo, en España es muy raro encontrar algún caso de este tipo, y es que un porcentaje muy pequeño de la población ha optado por esta alternativa.
Estos pequeños microchips cuentan con un tamaño aproximado de 12 milímetros, y se pueden introducir a por vía intramuscular entre el dedo pulgar y el índice. El pinchazo de implantación no duele mucho más que una inyección normal, y una vez que se introduce en el cuerpo, es apenas imperceptible.
Pero, ¿Qué ventajas nos generan estos pequeños artilugios dentro de nuestro cuerpo?
Los microchips tienen una tecnología estándar denominada NFC (Near-Feald Communication) o Comunicación de Campo Cercano. Se trata de una tecnología inalámbrica de corto alcance y alta frecuencia que permite el intercambio de datos entre dispositivos.
La ventaja que nos genera esta tecnología es la de poder interactuar con todos los lectores que se encuentran en nuestra vida cotidiana para poder hacer diferentes cosas como; poder abrir la cerradura de nuestras casas si tenemos cerraduras inteligentes, entrar por la puerta de nuestro trabajo sin necesidad de insertar ninguna tarjeta, acceder al ordenador sin necesidad de passwords, pagar sin tarjeta de crédito, o ponerte en contacto con tu médico si te encuentras mal (entre otras muchas cosas).
Uno de los países que ha sido pionero respecto a estos microchips, ha sido Suecia, donde desde hace 5 años decidieron llevar la construcción de la sociedad del futuro a un nivel más practico y algunas empresas han ofrecido la posibilidad a sus empleados de forma voluntaria el llevar incrustado un microchip en el cuerpo. De manera esta manera, los empleados pueden acceder a su oficina, usar la fotocopiadora y pagar en la cafetería de la empresa con ese microchip, lo cual simplifica algunas de sus tareas cotidianas dentro de la empresa.Algunos expertos advierten sobre cómo los chips pueden vulnerar la privacidad y seguridad de quienes los usan, ya que a medida que estos chips se integran en más servicios digitales pueden revelar datos importantes como el código de acceso a una vivienda, los datos de una cuenta bancaria, o datos sobre la salud de las personas. Esto obviamente es un claro foco de controversia, y seguirá siendo un motivo de preocupación de aquellas personas que lo utilicen.
Aunque se está trabajando en otras áreas para que los microchips mejoren la vida de las personas y sean capaces de mejorar su audición y su visión, por otro lado son un arma de doble filo. La realidad es que no existe ninguna garantía total de seguridad, teniendo la problemática de que hoy en día todos los dispositivos son manipulables en mayor o menor medida.