La movilidad eléctrica está cada vez más presente en nuestra sociedad, y se vaticina que durante los próximos años estará cada vez más extendida en el ámbito de la automoción. Este concepto surgió como consecuencia de la preocupación social por el medioambiente, y tiene como objetivo reducir el nivel de contaminación de las ciudades y fomentar un ecosistema sostenible.
De esta manera, parece bastante razonable que algunos organismos y cuerpos que trabajan al servicio de la ciudadanía prediquen con el ejemplo y tomen la iniciativa en lo que a este asunto se refiere. Tanto es así que un cuerpo de bomberos de California (EE.UU.), ha tomado la decisión de incorporar una flota de vehículos para apagar incendios que funcionan a través de un motor eléctrico.
Rosenbauer, una de las empresas líderes del mundo en la fabricación de vehículos de servicio y equipos contra incendios, ha sido la artífice de este novedoso vehículo, el cual se caracteriza por su motor eléctrico, por su gran ergonomía y por el potente sistema de iluminación que incorpora. Respecto a su acabado, se trata de un diseño mucho más compacto que el camión de bomberos convencional, y sus prestaciones resultan sorprendentes para un vehículo de esta clase.
Aunque en la página web de Rosenbauer se hace referencia al CFT (Concept Fire Truck), este camión ecológico es mucho más que un concepto o un mero prototipo. La fase de prueba ya ha tenido lugar en algunas ciudades de Europa, concretamente en Berlín y en Ámsterdam, y las previsiones apuntan a que pronto se empezará a ver este novedoso vehículo en muchas otras ciudades europeas (y de otros continentes).
Rosenbauer, una de las empresas líderes del mundo en la fabricación de vehículos de servicio y equipos contra incendios, ha sido la artífice de este novedoso vehículo, el cual se caracteriza por su motor eléctrico, por su gran ergonomía y por el potente sistema de iluminación que incorpora.
En cuanto a sus prestaciones, la empresa con sede en Leonding (Austria) ha optado por un diseño que prioriza la flexibilidad. Sus dimensiones son de 7,6×3,06m, pero el dato curioso es que el vehículo puede descender entre 100 y 250 milímetros para facilitar la subida de personas, o ascender entre 380 y 480 milímetros para poder avanzar con mayor facilidad sobre terrenos pantanosos.
El motor cuenta con 350 kw, el equivalente a más de 470 caballos, y tiene una autonomía de aproximadamente 30 kilómetros según indica el fabricante. Cabe destacar que el CFT genera mucho menos ruido que los camiones convencionales, por lo que la compañía ha optado por incorporar algunos de los sonidos que ya se utilizan para otros vehículos eléctricos, de manera que esto no suponga un peligro para la ciudadanía.
Respecto al color, el fabricante austríaco ha decidido prescindir del color rojo (habitual en este tipo de vehículos), y sustituirlo por tonos verdes. Según la compañía, la decisión de emplear este color en el diseño del camión se fundamenta en aumentar su visibilidad en las ciudades, además de dar énfasis a su faceta ecológica.
Se trata de un concepto algo revolucionario, pero parece que pronto empezaremos a ver este camión eléctrico circulando por varias ciudades del mundo. Las estimaciones de la compañía apuntan a que para el año 2030 ya se habrán vendido más de 3.000 unidades, y también vaticinan que habrá aproximadamente 800 de estos vehículos funcionando en Europa dentro de cinco años.