Tras un fallo de seguridad por parte de Google entre los años 2015 y 2018, la compañía ha decidido cerrar la red social Google Plus, una iniciativa llamada Project Strobe.
Esta app se lanzó en 2011 en un intento de hacerle competencia a las grandes redes sociales del momento como eran Facebook y Twitter, sin embargo no tuvo el éxito esperado.
El fallo en la API de Google en la que quedaron expuestos el nombre, la fecha de nacimiento, foto de perfil, ocupación, género y la dirección email en casi medio millón de usuarios junto con la baja interacción de los mismos, han llevado a la compañía a tomar esta decisión.
Google admite que el 90% de las sesiones de los usuarios de Google Plus tienen una duración de 5 segundos. Aunque la plataforma contaba con el respaldo del gran gigante en Internet no le ha servido para conectar con los usuarios y la red social.
Las sesiones de la mayor parte de los usuarios tenían una duración de menos de 5 segundos.
Alphabet emitió un comunicado en el que informaban de que el fallo fue solucionado inmediatamente en marzo de 2018, cuando fue descubierto. Pero el miedo a manchar el nombre de la marca Google les ha instado a cerrar la versión del consumidor.
Según la plataforma, unas 438 aplicaciones hicieron uso de la API en la que se podían acceder
a esos datos clave, aunque parece ser que no hicieron un uso inapropiado de la información. Aunque no tenían carácter público los desarrolladores tenían acceso a datos que los propios usuarios habían compartido.
Cierre en 10 meses para recopilar datos
La compañía asegura que el cierre no se va a llevar a cabo de un día para otro sino que tendrán unos 10 meses para seguir accediendo a la red. Será en agosto de 2019 cuando se produzca la desaparición. Mientras tanto, Google ofrecerá herramientas de migración para que los usuarios puedan obtener todos los datos y la información compartida durante estos años. Aunque la plataforma a nivel usuario va a desaparecer, las soluciones para empresas y profesionales se continuarán ofreciendo, pues Google+ ha demostrado tener un buen público en este terreno.
Por otro lado, Google tiene como objetivo implementar una nueva forma de otorgar permisos a las aplicaciones para que el usuario pueda conocer qué información se está compartiendo en cada una de las herramientas dependiendo de los permisos que soliciten.
Pretenden que los consumidores tengan un control más preciso sobre los datos. Con las nuevas modificaciones el usuario podrá ver los permisos solicitados por la aplicación de uno en uno dentro del cuadro de diálogo.