En la actualidad, existen diversos métodos de pago digitales que paulatinamente van sustituyendo a los que ya llevan años establecidos en casi todos los países. Concretamente, el dinero en efectivo ha perdido peso, y es que la mayoría de transacciones comerciales de todo el mundo se llevan a cabo con tarjeta (además de otros sistemas más novedosos que triunfan en países de Oriente como los códigos QR y el reconocimiento facial).

Otro ejemplo de método de pago digital moderno (aunque no muy habitual) es el que hay implementado en las tiendas Amazon Go.  En estas tiendas, los clientes no tienen que pasar los productos por ninguna caja registradora, sino que estos son detectados por unos sensores que hay situados a lo largo de cada local, y el pago se lleva a cabo de manera automática a través de sus respectivas cuentas de Amazon.

Cuando parecía que ese sistema permanecería de esta manera durante muchos años, Amazon ha traído de la mano una nueva propuesta de método de pago basada en la identificación biométrica mediante la palma de la mano. Según informaba el periódico Wall Street Journal, el gigante con sede en Seattle (Washington) está desarrollando un sistema que permita vincular las palmas de las manos con las tarjetas de crédito de los usuarios.

Respecto a su visión comercial, la idea de Amazon a corto plazo es la de empezar a implementar este nuevo sistema en su cadena de supermercados Whole Foods. Sin embargo, de cara a los próximos años, la compañía planea ofrecer esta solución a otras empresas que tengan esta necesidad.

Según informaba el periódico Wall Street Journal, el gigante con sede en Seattle (Washington) está desarrollando un sistema que permita vincular las palmas de las manos con las tarjetas de crédito de los usuarios.

Según apuntan diversos rumores, la compañía norteamericana Visa será uno de los primeros partners de Amazon en lo que a este sistema se refiere. No obstante, también se ha comentado que otras empresas de peso en el sector financiero como lo son JPMorgan Chase y Wells Fargo, podrían sumarse al proyecto más adelante.

Parece que el motivo por el que Amazon tiene tanto interés en implantar este nuevo sistema, deriva de algún problema relacionado con el sistema de Amazon Go. Esto se debe a que, aunque el sistema de sensores de detección de productos es muy preciso, a veces es complicado garantizar que no haya fallos en la detección de los usuarios que compran esos productos.

Sin embargo, ahora Amazon tendrá que afrontar una de las partes más difíciles del proyecto, que no es otra que la de generar confianza no sólo en el usuario final, sino también de cara a las entidades financieras que deben de apostar previamente en el proyecto. Suponemos que el gigante del E-Commerce no tendrá problema a la hora de generar esta confianza, pero sí es cierto que no se trata de un método de pago inexpugnable e inquebrantable.